Ella le define como divertido, buena persona, entregado y sensible.
Él como una persona alegre, transparente, fuerte y elegante.
Y yo, sin tener que definirlos, vi desde el primer momento que estaban hechos el uno para el otro.
Locos conocidos, afinidad en estado puro, y fieles a su esencia juntos y por separado. Alucinante viaje el trabajo que hicimos en tan solo un mes de preparación, porque así son ellos, dicho y hecho. Y nosotras no podíamos ser menos.
Las vistas al mar con recuerdo a la infancia, los colores otoñales, la intimidad de familiares y amigos, la música de cualquier estilo y a todas horas, la diversión, el ángel de los tatuadores, y mucha muchísima actitud fue lo que nos embriagó ese día.
No podemos estar más orgullosas de haber podido organizar y vivir este día con ellos.
A pleasure guys. You rock.